Las vidas de Sing Sing

John "Divine G" Whitfield, cuando regresa a su celda en Sing Sing, experimenta la tristeza del final de la función y el aplauso. A pesar de no haber cometido el asesinato que injustamente lo llevó a la cárcel, está cumpliendo una larga condena en esta prisión de alta seguridad. El teatro de la prisión es su única esperanza en una vida carcelaria llena de monotonía y silenciosa desesperación. Incluso en el escenario, hay momentos en que John logra transportarse más allá de los altos muros. Sin embargo, Clarence "Divine Eye" Maclin, un personaje impredecible que se unió al programa de teatro, trastorna la rutina creativa del grupo. Maclin insiste en poner en escena una obra de comedia. La película destaca el poder transformador del arte y la resistencia del espíritu humano. Los espectadores se unen a las experiencias de los personajes mientras recurren al arte para enfrentar desafíos y los acompañan en su lucha por la supervivencia.

La película fue filmada en la Prisión de Sing Sing, ubicada en el estado de Nueva York y una de las prisiones de alta seguridad más famosas de Estados Unidos.